Quizá fue una hecatombe de esperanzas
un derrumbe de algún modo previsto
Ah, pero mi tristeza solo tuvo un sentido
todas mis intuiciones se asomaron para verme sufrir
y por cierto me vieron hasta aquí
Había hecho y rehecho mis trayectos contigo
hasta aquí había apostado a inventar la verdad
pero vos encontraste la manera...
una manera tierna y a la vez implacable de desahuciar mi amor
con un solo pronostico
lo quitaste de los suburbios de tu vida posible
lo envolviste en nostalgias
lo cargaste por cuadras y cuadras
y despacito sin que el aire nocturno lo advirtiera
Ahí nomas lo dejaste a solas con su suerte que no es mucha.
Creo que tenes razón
la culpa es de uno cuando no enamora
y no de los pretextos ni del tiempo
Hace mucho, muchisimo
que yo no me enfrentaba como anoche al espejo
y fue implacable como vos
mas no fue tierno
ahora estoy solo francamente solo
siempre cuesta un poquito
empezar a sentirse desgraciado
antes de regresar a mis lóbregos cuarteles de invierno
con los ojos bien secos
por si acaso miro como te vas adentrando en la niebla
y empiezo a recordarte.
un derrumbe de algún modo previsto
Ah, pero mi tristeza solo tuvo un sentido
todas mis intuiciones se asomaron para verme sufrir
y por cierto me vieron hasta aquí
Había hecho y rehecho mis trayectos contigo
hasta aquí había apostado a inventar la verdad
pero vos encontraste la manera...
una manera tierna y a la vez implacable de desahuciar mi amor
con un solo pronostico
lo quitaste de los suburbios de tu vida posible
lo envolviste en nostalgias
lo cargaste por cuadras y cuadras
y despacito sin que el aire nocturno lo advirtiera
Ahí nomas lo dejaste a solas con su suerte que no es mucha.
Creo que tenes razón
la culpa es de uno cuando no enamora
y no de los pretextos ni del tiempo
Hace mucho, muchisimo
que yo no me enfrentaba como anoche al espejo
y fue implacable como vos
mas no fue tierno
ahora estoy solo francamente solo
siempre cuesta un poquito
empezar a sentirse desgraciado
antes de regresar a mis lóbregos cuarteles de invierno
con los ojos bien secos
por si acaso miro como te vas adentrando en la niebla
y empiezo a recordarte.
·Mario Benedetti·
Así es...